La mayoría de las enfermeras en España están al límite debido a la sobrecarga y el elevado volumen de tareas. Según una encuesta del Consejo General de Enfermería (CGE) realizada a más de 8.000 profesionales, el 63% de ellas ha considerado abandonar la profesión por la presión laboral. Además, un preocupante 36% no volvería a escoger esta carrera si pudiera retroceder en el tiempo. Estos datos reflejan un deterioro notable en la situación de las enfermeras españolas en los últimos años, especialmente tras el impacto de la pandemia de Covid-19.
Situación insostenible
La encuesta señala que más del 95% de las enfermeras perciben una carga de trabajo excesiva, y el 88% de ellas asegura que esta situación les ha afectado gravemente en su salud mental. «Nos encontramos en una situación casi caótica», comentó Florentino Pérez Raya, presidente del CGE, quien insistió en que el panorama es insostenible y que las políticas actuales no ofrecen una solución a corto plazo.
Enfermeras al borde del colapso
La situación de las enfermeras en España es particularmente grave en comparación con otros países de la Unión Europea. Según el CGE, España necesita contratar a 125.000 enfermeras adicionales para equipararse con la ratio media europea. Esta carencia de personal ha llevado a que más de un 27% de las enfermeras españolas sufra de depresión y al 23% a solicitar bajas laborales.
Además, el 56% de las enfermeras encuestadas considera que su situación laboral ha empeorado en los últimos años, a lo que se suma un incremento en las agresiones físicas y verbales, que alcanzaron las 2.840 en 2023, un 10% más que el año anterior.
Llamado a los políticos para una solución urgente
El CGE ha lanzado un llamado a las autoridades para que implementen de inmediato medidas que ayuden a aliviar la carga laboral de estas profesionales. Además, advirtieron que una parte significativa del personal de enfermería se jubilará en los próximos años, lo que agravará aún más la situación. «El Sistema Nacional de Salud se tambalea y, con él, la atención a los pacientes», concluyó el CGE.