Un equipo francés fue el primero en responder a las devastadoras inundaciones en Valencia, donde las autoridades locales brillaban por su ausencia.
La tragedia en Valencia ha cobrado la vida de más de 200 personas tras las intensas inundaciones, generando indignación y críticas, especialmente desde Francia. El diario francés Libération publicó una portada en la que cuestiona la aparente inacción del gobierno español, titulado: «Inundaciones en España: muertes evitables».
Después de la tragedia, el ministro del Interior de Francia, Bruno Retailleau, ofreció el despliegue de un equipo de rescate compuesto por 200 bomberos y vehículos para ayudar en las labores de socorro. Sin embargo, la respuesta del ministro del Interior de España, Fernando Grande-Marlaska, fue sorprendente: rechazó la ayuda, alegando que «no es necesario».
Bomberos franceses: «Somos los primeros en llegar»
Los miembros del Grupo Francés de Ayuda en Casos de Desastre (GSCF), o bomberos humanitarios, quedaron perplejos al llegar a uno de los pueblos afectados en Valencia. Se sorprendieron al descubrir que eran las primeras autoridades en presentarse en la zona; antes de su llegada, únicamente había civiles voluntarios prestando ayuda.
En su cuenta de Twitter, el GSCF informó: «Llegada de nuestro equipo de soporte a España el 1 de noviembre a primera hora de la tarde. Confirmación: primer equipo de rescate desplegado en la zona, listo para evaluar las necesidades y brindar asistencia. ¡Gracias por vuestro apoyo y solidaridad!».
El bombero francés flipando al enterarse que son la primera fuerza de ayuda en llegar al lugar. Que ni policía ni hostias.
pic.twitter.com/WweHJMdQuS— Jacques O (@Dr_Destouches) November 2, 2024
En un vídeo compartido por el grupo, uno de los bomberos franceses entabla una conversación con un vecino valenciano, visiblemente impactado: «¿Me estás diciendo que somos los primeros auxilios en llegar? ¿Nadie ha venido a ayudarles?». Al ver la desesperación del vecino, el bombero aseguró: «Vamos a buscar el permiso para entregarles el material necesario. Hay que estar fuertes, vamos a ayudar».
Este incidente ha dejado perplejos a muchos en España y Francia, aumentando la presión sobre las autoridades españolas para responder adecuadamente a futuras emergencias.
