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Dennis Viehof, imputado por el accidente mortal en Cala Bona, deberá declarar en febrero

El patrón del yate La Luna está acusado de homicidio imprudente y omisión del deber de socorro tras el choque que costó la vida al joven Guillem Comamala
Dennis Viehof, acusado de homicidio imprudente por el accidente en Cala Bona que costó la vida a Guillem Comamala, declarará ante la jueza en febrero.

El próximo mes de febrero, Dennis Viehof, ciudadano alemán de 34 años, deberá comparecer ante la magistrada de Manacor que investiga el trágico accidente marítimo ocurrido en agosto de 2024 en Cala Bona, Son Servera. El joven mallorquín Guillem Comamala, de 20 años, perdió la vida tras ser arrollado por el yate La Luna, cuyo patrón está acusado de homicidio imprudente y omisión del deber de socorro.

Los hechos del accidente

La noche del 23 de agosto de 2024, Guillem Comamala pescaba calamares junto a su tío y primo en una pequeña barca cuando el yate La Luna, de unos 20 metros de eslora, chocó contra ellos. El impacto arrancó el motor de la embarcación, haciendo que el joven cayera al agua y fuera alcanzado por las hélices del yate, lo que provocó su fallecimiento instantáneo.

El patrón del yate y la investigación

Dennis Viehof, hijo del propietario de La Luna, se encontraba a los mandos del yate cuando ocurrió el accidente. Según varios testigos, el yate navegaba a gran velocidad, alrededor de 20 nudos, y sus ocupantes estaban celebrando una fiesta en la que se consumió alcohol. Tras el choque, el yate no se detuvo, continuando su rumbo hasta ser localizado al día siguiente en Porto Cristo.

En la inspección realizada por la Guardia Civil, se encontraron botellas de alcohol y vasos, algunos de ellos junto al panel de mandos. Además, el patrón negó haber sido consciente de la colisión.

Declaraciones de los testigos

El tío de Guillem relató que intentó evitar el impacto acelerando la barca, pero no fue suficiente. Aunque el golpe fue leve, giró y se dio cuenta de que su sobrino no estaba a bordo. Otros testigos confirmaron que La Luna realizaba maniobras temerarias y que los ocupantes estaban bajo los efectos del alcohol.

Posibles responsabilidades compartidas

El informe del Servicio Marítimo de la Guardia Civil señala una posible concurrencia de responsabilidades. Aunque La Luna navegaba a una velocidad excesiva para las condiciones, la barca de pesca no contaba con iluminación suficiente para ser vista en la oscuridad.

Testimonios y pruebas

La jueza instructora, que ha recopilado numerosos testimonios y pruebas, interrogará en febrero a Dennis Viehof para determinar su grado de responsabilidad en el siniestro. Este caso pone de manifiesto la importancia de la seguridad y la responsabilidad en el mar, y el impacto que tienen estos trágicos accidentes en las comunidades locales.

By Redacción

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