El Tribunal Supremo ha llamado a declarar al secretario general del PSOE madrileño, Juan Lobato, en calidad de testigo por la investigación de la filtración de correos electrónicos relacionados con Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Lobato deberá comparecer el próximo 29 de noviembre y presentar el acta notarial de los mensajes intercambiados con Moncloa.
El papel de Presidencia del Gobierno
De acuerdo con la información publicada por ABC, Presidencia del Gobierno envió a Lobato un correo electrónico del abogado de González Amador la mañana posterior a la primera filtración, con el objetivo de que lo utilizara contra Ayuso en la Asamblea de Madrid. Sin embargo, el portavoz socialista se negó a hacerlo y decidió llevar los mensajes ante un notario para dejar constancia de su contenido.
El juez Ángel Hurtado ha destacado que la declaración de Lobato es clave para esclarecer los hechos y resolver la posible implicación de altos cargos en este caso.
La defensa de Lobato
En declaraciones al programa Al Rojo Vivo de La Sexta, Lobato afirmó que la captura de pantalla que recibió a través de Whatsapp procedía de información que ya había sido publicada en los medios de comunicación, aunque no llevaba la marca de agua de ninguna cabecera. Lobato insistió en que actuó de manera transparente al remitir los mensajes a un notario.
Contexto de la investigación
Esta citación forma parte de un caso más amplio que implica al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por la supuesta filtración de correos electrónicos relacionados con la defensa del novio de Ayuso. Además, algunas acusaciones han solicitado ampliar la investigación para incluir a otros nombres destacados del entorno de Moncloa.