Joe Biden, presidente de Estados Unidos, anunció este domingo su decisión de indultar a su hijo Hunter Biden, acusado de delitos fiscales y posesión ilegal de armas. Biden justificó esta medida como una respuesta a lo que considera una persecución política liderada por sus oponentes republicanos.
Hunter Biden, quien reconoció su culpabilidad en junio por la compra ilegal de un arma de fuego y en septiembre por nueve delitos fiscales, enfrentaba una condena de hasta 40 años de prisión. Según el presidente, sus rivales políticos utilizaron estos cargos para atacarlo directamente.
«Lo señalaron por ser mi hijo»
Joe Biden explicó que los fiscales trataron a Hunter de manera distinta por su parentesco con él. «Intentaron quebrar a Hunter, quien lleva cinco años y medio sobrio, con el objetivo de dañarme a mí», declaró el mandatario. Además, Biden reiteró que no intervino en las decisiones del Departamento de Justicia, aunque calificó el caso contra su hijo como una «persecución selectiva».
Los delitos imputados a Hunter Biden
Hunter compró un arma de fuego en 2018 mientras consumía drogas de forma activa, un delito que podía costarle hasta 25 años de prisión. Además, en septiembre reconoció que no pagó 1,4 millones de dólares en impuestos entre 2016 y 2019. También aceptó haber registrado como gastos comerciales pagos improcedentes, como servicios de prostitución, una suscripción a una página web pornográfica y la universidad de su hija.
Biden critica a los republicanos
El presidente arremetió contra los líderes republicanos, acusándolos de haber presionado políticamente para instigar los cargos contra Hunter. Biden señaló que las acusaciones fiscales contra su hijo solo surgieron después de que sus rivales promovieran una investigación en el Congreso para atacar su gestión. Concluyó tajantemente: “Ya basta”.
