En Madrid, Irene Montero presentó su libro, Algo habremos hecho, en un acto que reunió a la cúpula de Podemos, incluida Ione Belarra y Pablo Iglesias, y donde la exministra aprovechó para expresar sus críticas más fuertes. La reunión, que incluso dejó personas fuera del evento por falta de espacio, fue el escenario en el que Montero lanzó una serie de acusaciones contra sus antiguos aliados políticos, especialmente Yolanda Díaz, a quien considera “el mayor error político” de Podemos.
Montero arremete contra Yolanda Díaz: «Nuestro mayor error político»
Durante su intervención, Montero se mostró implacable en su valoración de Yolanda Díaz, a quien señaló como una de las causas del debilitamiento de Podemos. Según la exministra, el partido morado apostó por Díaz en 2021 con la esperanza de que ampliara la capacidad transformadora de Unidas Podemos, pero lamenta que la estrategia solo haya servido para que una figura sin intención de “cambiar nada” se beneficiara de su esfuerzo. «Fue nuestro mayor error político», aseguró Montero, una frase que resonó entre los asistentes y que reabre el debate sobre la crisis de liderazgo en la izquierda española.
El PSOE bajo fuego: acusaciones de manipulación política
Las críticas de Montero no se limitaron a Díaz. También tuvo duras palabras para el PSOE, al que acusa de haber impulsado una “operación política” para neutralizar a Podemos. Según la exministra, los socialistas intentaron que el liderazgo de Unidas Podemos pasara a ser funcional para sus propios intereses, eliminando la influencia de Podemos en el gobierno y dejando a Sumar como un instrumento sin autonomía real. “En el Gobierno solo manda el PSOE”, aseveró Montero, criticando lo que considera una falta de compromiso de los socialistas con los valores transformadores de la izquierda.
Una izquierda fragmentada y sin proyecto de unidad
Las palabras de Montero también reflejan las profundas divisiones que persisten entre Podemos y Sumar. Aunque ambos partidos afirman que buscan dejar atrás las disputas internas, la realidad demuestra que las luchas por el liderazgo y las distintas visiones siguen debilitando el espacio de la izquierda en España. Para Montero, el objetivo de Podemos debe ser retomar su posición y conseguir que el PSOE trate a la izquierda alternativa como un socio de “coordinación”, no de “subordinación”, pero esta visión aún está lejos de materializarse.