El aumento de casos de demencia en personas mayores es una preocupación creciente en España y el mundo. Según un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Nottingham, la Universidad de Manchester y el King’s College de Londres, ciertos medicamentos de uso frecuente podrían estar relacionados con un mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad. El análisis, basado en datos de más de 170,000 pacientes, destaca algunos componentes específicos como posibles responsables.
En este artículo, detallaremos los hallazgos del estudio y los medicamentos implicados, así como las alternativas más seguras.
El panorama de la demencia en España
Se estima que, en los próximos treinta años, el número de personas con demencia en España crecerá un 83%. Este incremento se debe principalmente al envejecimiento de la población, especialmente al aumento de personas mayores de 90 años. La demencia, una enfermedad degenerativa que afecta la memoria, el juicio y el comportamiento, no solo impacta a los pacientes, sino también a sus familias y cuidadores.
En este contexto, los investigadores buscan factores que puedan reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Uno de los focos de atención recientes son ciertos medicamentos de uso común entre personas mayores.
Medicamentos bajo sospecha
Varios tipos de fármacos recetados para tratar condiciones comunes, como alergias, problemas gástricos o incontinencia, están siendo estudiados por su posible vínculo con la demencia. Aunque son efectivos para tratar las afecciones para las que se recetan, algunos de ellos podrían tener efectos no deseados a largo plazo en la salud cerebral.
Un ejemplo destacado son los medicamentos anticolinérgicos, ampliamente utilizados para bloquear los efectos de la acetilcolina, un neurotransmisor clave en el sistema nervioso. Estos medicamentos se encuentran en tratamientos como:
- Antihistamínicos
- Antidepresivos
- Fármacos para la vejiga hiperactiva
- Medicamentos contra el vértigo
Hallazgos recientes
Un grupo de investigadores en universidades de prestigio en Reino Unido analizó datos de más de 170,000 pacientes mayores de 55 años, observando un posible vínculo entre ciertos medicamentos y el desarrollo de demencia. Algunos ingredientes específicos se asociaron con un mayor riesgo, mientras que otros parecen ser más seguros.
Ingredientes en el foco
Entre los componentes identificados como potencialmente problemáticos destacan:
- Clorhidrato de oxibutinina
- Succinato de solifenacina
- Tartrato de tolterodina
El riesgo de desarrollar demencia aumentó hasta un 29% en pacientes que tomaron dosis diarias de estos medicamentos durante un periodo prolongado.
Alternativas más seguras
No todos los medicamentos de este tipo presentan riesgos. Algunos fármacos considerados seguros para la función cognitiva incluyen:
- Darifenacina
- Fumarato de fesoterodina
- Clorhidrato de flaxovato
- Clorhidrato de propiverina
- Cloruro de trospio
Los expertos subrayan la importancia de evaluar cada caso individual y, siempre que sea posible, buscar tratamientos alternativos para minimizar el impacto en la salud cerebral.
Conclusión basada en el estudio
El trabajo realizado por las universidades de Nottingham, Manchester y King’s College no solo resalta los riesgos asociados con ciertos medicamentos, sino que también abre la puerta a una mayor conciencia sobre la prescripción médica en personas mayores. Dado el creciente impacto de la demencia en España, reducir los factores de riesgo modificables, como el uso de fármacos específicos, podría tener un impacto significativo en la prevención.
El mensaje para pacientes y cuidadores es claro: consultar al médico sobre los riesgos potenciales de los tratamientos actuales y explorar alternativas más seguras es fundamental.