El cantante Raphael, una de las grandes figuras de la música española, atraviesa un delicado momento personal tras ser diagnosticado con un linfoma cerebral primario. Diez días después de haber sido ingresado en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid, el artista recibió el alta y actualmente descansa en su residencia mientras continúa con el tratamiento de manera ambulatoria.
Ingreso y diagnóstico
El pasado 17 de diciembre, Raphael fue ingresado de urgencia debido a un percance ocurrido durante la grabación del especial de Navidad del programa La Revuelta. En un principio, los médicos sospecharon que se trataba de un ictus. Sin embargo, las pruebas descartaron esta hipótesis, y no fue hasta el 26 de diciembre cuando los especialistas del Hospital 12 de Octubre confirmaron el diagnóstico: un linfoma cerebral primario.
Este tipo de cáncer, que afecta a los glóbulos blancos y se origina en el cerebro, se manifestó en el caso de Raphael en forma de dos nódulos localizados en el hemisferio izquierdo. Según el comunicado oficial del hospital, la dolencia explicó los síntomas neurológicos que llevaron al ingreso del cantante.
Tratamiento y recuperación
Durante su estancia hospitalaria, Raphael comenzó un tratamiento específico para combatir esta enfermedad. Ahora, bajo seguimiento médico, continuará la medicación desde la comodidad de su hogar. Su hijo, Manuel Martos, comentó en el programa TardeAR: “Ahora que el tratamiento haga su efecto, que es lo que todos queremos. A mejorar, que es lo importante”.
Una recuperación en un entorno privilegiado
Raphael pasará las fechas navideñas en su residencia de Montepríncipe, una exclusiva urbanización en Boadilla del Monte, Madrid. La vivienda, conocida como La casa Martos, es una propiedad de 2.400 metros cuadrados que el cantante comparte con su esposa, Natalia Figueroa. Este hogar, rodeado de privacidad y con todas las comodidades necesarias, ha sido testigo de más de cinco décadas de vida familiar y amor.
Además de su residencia principal, la familia Martos Figueroa posee otras propiedades, como una casa de vacaciones en Ibiza y una emblemática residencia en Sigüenza, heredada por Natalia Figueroa en los años 90.
Próximos pasos en su recuperación
Aunque se desconoce el tiempo que durará el tratamiento, Raphael se encuentra rodeado del apoyo de su familia, un elemento fundamental en esta etapa. La comunidad artística y sus seguidores también han expresado innumerables muestras de cariño y buenos deseos para el artista, quien sigue siendo un referente de la música española.