La policía del aeropuerto de Estambul logró rescatar a un bebé gorila que iba a ser vendido en el mercado negro. La pequeña cría, procedente de Nigeria, fue descubierta dentro de un cajón de madera, una cruel manera de ocultarla en su viaje hacia Bangkok, Tailandia.
Un operativo internacional contra el tráfico ilegal
El rescate se produjo durante un control de rutina en la terminal de carga del aeropuerto. Los agentes sospecharon al notar irregularidades en la documentación del envío. Tras abrir el cajón, encontraron al pequeño primate en condiciones deplorables, evidenciando el sufrimiento al que fue sometido durante el traslado.
Este caso pone nuevamente en el foco el tráfico ilegal de especies, una actividad lucrativa que amenaza la supervivencia de animales en peligro de extinción.
💔🦍 La policía del aeropuerto de #Estambul rescató a un bebé #gorila que iba a ser vendido en el mercado negro.
La cría, procedente de #Nigeria, iba encerrada en un cajón de madera y tenía como destino #Bangkok. 🇳🇬🇹🇭 pic.twitter.com/njZR36ifGu
— Luis Gabriel Velázquez (@soyluisgabriel1) December 28, 2024
La procedencia y destino de la cría
Según las autoridades, el bebé gorila fue transportado desde Nigeria, un país conocido como punto de origen para el tráfico de fauna salvaje. El destino final era Bangkok, ciudad que, según informes, es uno de los mercados clave para la compra de animales exóticos.
¿Qué se hace contra el tráfico de especies?
El tráfico ilegal de animales está considerado como una de las principales amenazas a la biodiversidad mundial. Los esfuerzos de organismos internacionales, como CITES, buscan frenar esta práctica, pero la demanda en ciertos países sigue alimentando este mercado negro.