VOX en el Consell de Mallorca muestra su rechazo a esta decisión del Ministerio de Cultura
VOX en el Consell de Mallorca ha expresado su profundo rechazo a la concesión de la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes a la Obra Cultural Balear (OCB). Este reconocimiento, entregado en una ceremonia en la Real Fábrica de Artillería de Sevilla, ha sido calificado como una medida ideológica que premia a una entidad con claros vínculos separatistas.
“Un premio político disfrazado de mérito cultural”
David Gil, portavoz adjunto de VOX en el Consell, aseguró que este galardón «no reconoce méritos culturales objetivos, sino que responde a un claro pago político». Según Gil, la OCB ha utilizado la cultura como un instrumento para dividir a los mallorquines, fomentando el separatismo en las Islas Baleares.
“Premiar a la Obra Cultural Balear es respaldar a una organización que ha promovido el adoctrinamiento ideológico y la división social. Este reconocimiento no está basado en el mérito cultural, sino en intereses partidistas al servicio del nacionalismo”, afirmó Gil.
Vínculos con el separatismo y el 1 de octubre
VOX recordó que la Obra Cultural Balear, fundada en 1962, ha sido señalada en diversas ocasiones por su relación con movimientos que promueven la desintegración de la identidad española en las Islas Baleares. Su participación activa junto a entidades como Òmnium Cultural, implicadas en el Golpe de Estado del 1 de octubre de 2017 en Cataluña, refuerza las críticas hacia la distinción otorgada por el Gobierno.
“Es inaceptable que el Gobierno de Sánchez siga instrumentalizando las instituciones para premiar a organizaciones nacionalistas mientras ignora a los verdaderos representantes de la cultura española”, añadió Gil.
Una cultura que una, no que divida
Desde VOX, se insiste en la necesidad de una cultura que fomente la unidad nacional, el respeto por las tradiciones y la convivencia entre todos los ciudadanos de Mallorca y de España. La formación política reafirma su compromiso con una cultura integradora y exige al Gobierno central que abandone el sectarismo en la concesión de premios y reconocimientos.