El pasado 2 de octubre, agentes de la Unidad de Seguridad Integral (USEI) de la Policía Local acudieron a un instituto de enseñanza secundaria tras recibir un aviso de que un menor estaba exhibiendo un arma entre sus compañeros. Los hechos ocurrieron sobre las 13:15 horas cuando el equipo directivo del centro alertó a las autoridades sobre un alumno que había mostrado una pistola en clase.
Gracias a la intervención del vigilante de seguridad del centro, el menor entregó el arma voluntariamente. Tras comprobar que se trataba de una pistola de aire comprimido, los profesores pidieron al joven que mostrara sus pertenencias, preocupados de que pudiera llevar más objetos peligrosos. Sin embargo, el menor se negó a colaborar, por lo que fue necesario solicitar la presencia de la policía.
Negativa a colaborar y desinterés del padre
Los agentes de la Policía Local conversaron con el menor durante 45 minutos, tratando de hacerle entender la gravedad de la situación y las posibles consecuencias legales de sus actos. A pesar de los esfuerzos de los policías, el alumno mantuvo una actitud negativa y se negó a mostrar el contenido de su bandolera.
Cuando se contactó con los padres del menor, el padre mostró un total desinterés por lo sucedido, negándose también a colaborar con las autoridades.
Detención y hallazgo de armas blancas
Finalmente, en presencia del director y la jefa de estudios del instituto, los agentes procedieron a la detención del menor, informándole de sus derechos. Durante la inspección de sus pertenencias, realizada de manera respetuosa para preservar la intimidad del joven, los agentes encontraron dos navajas de mariposa, cuyo origen o propósito el menor no quiso explicar.
El caso fue trasladado a la Policía Nacional, que se encargó de las diligencias correspondientes.